Una valiosa imagen de la Virgen de Guadalupe, considerada milagrosa por los habitantes de Mulegé, Baja California Sur, fue restaurada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), luego de presentar un avanzado deterioro por hongos y los estragos del huracán Kay en 2022.
La pintura, de 176 centímetros de largo por 138 de ancho, data del siglo XVII y es uno de los últimos vestigios materiales de las misiones jesuitas en la región. Fue encontrada entre los restos de la antigua Misión Nuestra Señora de Guadalupe de Huasinapí por la familia Aguilar, que durante ocho generaciones ha custodiado la obra.
Tras años de exposición al clima y sin condiciones adecuadas de conservación, la pieza presentaba manchas, suciedad y pérdida de material pictórico. Por ello, especialistas del INAH la trasladaron —en un trayecto de hasta nueve horas a través de la sierra— a un centro de restauración, donde se le aplicó un tratamiento con fungicidas, se reemplazó el soporte de lino y se estabilizó su estructura.
La restauradora Julieta Cabriada, encargada del proyecto, destacó que esta obra es el único elemento físico que sobrevive de la ruta misional jesuita que conectaba desde Loreto hasta la Alta California. Su importancia histórica y cultural es enorme, ya que representa el esfuerzo evangelizador de la colonia española y el arraigo religioso de las comunidades del norte del país.
Aunque se desconoce el autor, debido a la pérdida de la parte inferior del lienzo donde se solía firmar, la imagen fue devuelta a la comunidad como símbolo de identidad y devoción.