El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, cruzó la frontera con China a bordo de su tren blindado rumbo a Pekín para participar en el desfile militar por el 80 aniversario de la rendición de Japón en la Segunda Guerra Mundial, informó este martes la emisora estatal Voice of Korea.
El viaje, que inició el lunes desde Pyongyang y se prolongará casi un día, marca la primera salida internacional de Kim en seis años y tendrá un alto valor diplomático: se prevé que por primera vez aparezca en un mismo evento junto al presidente de China, Xi Jinping, y el mandatario ruso, Vladimir Putin.
De acuerdo con la agencia KCNA, Kim viaja acompañado de altos funcionarios del Partido de los Trabajadores y de la canciller Choe Son-hui. El Kremlin adelantó que, durante el desfile, Kim y Putin se ubicarán a un lado de Xi Jinping, en una muestra de la creciente alianza entre los tres países frente a Estados Unidos y sus aliados.
El viaje también busca reforzar los vínculos con Pekín, que se habían enfriado ante el fortalecimiento de la cooperación militar entre Pyongyang y Moscú. Este acercamiento se consolidó con un acuerdo que incluye asistencia militar mutua en caso de agresión y la participación de tropas norcoreanas en la invasión de Ucrania.
La presencia conjunta de los tres líderes en Pekín será observada como un mensaje de unidad política y militar en un momento de tensiones crecientes en Asia y Europa.