Cuba sufrió este miércoles un apagón generalizado, el quinto en menos de un año, dejando sin electricidad a sus 9,7 millones de habitantes. El Ministerio de Energía y Minas informó que la falla se originó en una desconexión total del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), posiblemente vinculada a una salida inesperada de la central termoeléctrica Antonio Guiteras, aunque las causas aún se investigan.
La isla vive una grave crisis energética desde hace más de un año debido al deterioro de su infraestructura eléctrica. El sistema depende de ocho termoeléctricas obsoletas y de grupos electrógenos que requieren un suministro constante de combustible, recurso escaso en el país. A esto se suma una red de transmisión desgastada, incapaz de sostener la creciente demanda.
Pese a la instalación de 28 parques fotovoltaicos con apoyo de China —parte de un plan de 52 para este año—, los esfuerzos no han logrado reducir los constantes cortes de luz. Desde octubre de 2024, Cuba ha enfrentado ya cuatro apagones totales, algunos prolongados durante varios días, lo que ha afectado severamente la vida diaria, la economía y los servicios básicos de la población.