El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reconoció en su conferencia matutina que su administración no ha logrado disminuir el delito de extorsión en el país. Esta admisión surge tras el incendio de dos negocios en Coatzacoalcos, Veracruz, atribuido al cobro de piso.
López Obrador destacó que, aunque ha habido reducciones en varios delitos, la extorsión sigue siendo un desafío considerable. “Hay delitos, no solo en Veracruz, sino a nivel nacional, que dañan mucho y que nos están costando trabajo controlar, básicamente lo que tiene que ver con extorsión”, afirmó.
Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, la extorsión incrementó un 30.5% durante el primer año de su gobierno, con 6,895 casos en 2018 aumentando a 9,003 en 2019. Aunque hubo una disminución en 2020 a 8,380 casos, los números repuntaron en 2021 y alcanzaron su punto más alto en 2022 con 11,039 casos. Este año, hasta junio, se han registrado 5,503 casos, con un pico en abril de 1,028 incidentes.
Reducción en Otros Delitos
En contraste, el presidente señaló avances significativos en la disminución de otros delitos graves. El secuestro ha disminuido en un 70%, pasando de 161 casos en enero de 2019 a 53 en junio de 2023. El robo de vehículos también ha visto una reducción del 50.3%, con 7,163 casos en junio de este año comparados con 14,405 en diciembre de 2018.
López Obrador también mencionó el éxito en la lucha contra el robo de hidrocarburos, conocido como huachicol, con una reducción del 95%, lo que ha ahorrado al país aproximadamente 330 mil millones de pesos.
A pesar de estos logros, el presidente subrayó que la extorsión sigue siendo una “asignatura pendiente” para su gobierno.