El sexenio de Andrés Manuel López Obrador ha consolidado el fortalecimiento de las fuerzas armadas en México. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Marina han visto un incremento significativo tanto en su presupuesto como en sus funciones, controlando desde aeropuertos hasta aduanas. Esta semana, se discutirá en la Cámara de Diputados el último gran proyecto del presidente: la transición de la Guardia Nacional al mando del Ejército.
El presupuesto destinado a la Sedena, Marina y Guardia Nacional ha pasado de 155 mil millones en 2020 a más de 383 mil millones en 2023. La Guardia Nacional, que comenzó con 40 mil elementos, cuenta hoy con 135 mil agentes distribuidos en 594 regiones estratégicas del país. Según el gobierno, este cuerpo tiene una alta aceptación popular, con el 74% de aprobación de su efectividad, superando a las policías locales.
Aunque la propuesta ha generado críticas por parte de la oposición y organizaciones civiles que alertan sobre una posible militarización del país, el dictamen argumenta que la Guardia Nacional seguirá funcionando bajo principios de seguridad pública, con respeto a los derechos humanos-