El grupo BRICS+, reunido en Kazán, anunció la creación de una plataforma de inversiones y un sistema de pagos propio llamado BRICS Clear, como respuesta a las sanciones y dependencias financieras impuestas por Occidente. Este desarrollo busca fortalecer la independencia de sus economías y reducir la dependencia del sistema de pagos SWIFT, dominado por el dólar.
El canciller brasileño Mauro Vieira destacó la relevancia del BRICS+ como “fuerza estabilizadora” en el Sur global y heredero de movimientos de independencia económica. Durante la cumbre, el presidente ruso Vladimir Putin reforzó esta visión, impulsando un mercado de materias primas y promoviendo un nuevo orden económico que privilegie el crecimiento del Sur sobre el Norte.
Expansión y nuevos asociados
La cumbre también marcó la inclusión de 13 naciones como estados asociados, entre ellos Argelia, Bolivia y Turquía. Aunque Venezuela fue invitada, no fue incluida como asociada, lo que, según su cancillería, se debió a un veto de Brasil. Los actuales miembros del bloque incluyen a Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica, y desde este año, Emiratos Árabes Unidos, Irán, Egipto y Etiopía.