La Policía Nacional de España, en coordinación con la DEA de Estados Unidos y autoridades de Países Bajos, desmanteló una estructura operativa del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) asentada en territorio español. El operativo, denominado Oyamel, dejó un saldo de 20 personas detenidas, entre ellas integrantes de la camorra italiana y dos objetivos prioritarios para el gobierno estadounidense.
De acuerdo con la Dirección General de la Policía, la red introducía grandes cantidades de droga ocultas en maquinaria industrial de gran tonelaje. Durante los cateos, los agentes aseguraron 1,870 kilos de cocaína, 375 kilos de anfetamina, 275,000 euros en efectivo, criptomonedas valuadas en 15 mil dólares, armas cortas, 15 vehículos y 14 kilos de plata.
La investigación reveló que la organización coordinaba envíos desde una finca en Ávila, con ramificaciones en Bilbao y Valencia. Además, utilizaban propiedades en Talavera de la Reina, en Toledo, para recibir y despachar la maquinaria cargada con estupefacientes hacia Italia, donde operaban con apoyo de la camorra napolitana. Entre los detenidos se encuentra un empresario español que facilitaba la logística y el lavado de dinero mediante varias sociedades mercantiles.