Durante 2024, al menos 16 caravanas migrantes han cruzado Oaxaca, con miles de personas buscando llegar a Estados Unidos. Entre ellas está Jacqueline Solórzano, una mujer embarazada de seis meses que, junto a su familia, ha recorrido más de 350 kilómetros desde Tapachula, Chiapas, enfrentando agotamiento y enfermedades, pero recibiendo también apoyo en el camino.
Formación y retos
La mayoría de estas caravanas surgen en Tapachula, donde migrantes de diversas nacionalidades se agrupan para realizar trámites migratorios. Sin embargo, enfrentan dificultades como documentos que les exigen abandonar México en siete días o desintegraciones por el cansancio.
Los migrantes, organizados en caravanas como “Promesas del Señor”, denuncian engaños y abusos durante su trayecto. Niños y mujeres son los más afectados, padeciendo enfermedades respiratorias y desnutrición. A pesar de ello, la esperanza y la solidaridad entre los migrantes los impulsa a seguir adelante.
Una travesía interminable
Mientras unos avanzan hacia la Ciudad de México, nuevas caravanas se preparan para cruzar Oaxaca, evidenciando la persistencia del fenómeno migratorio. Aunque el camino está lleno de obstáculos, los migrantes no pierden la fe en alcanzar un mejor futuro.