Un equipo de científicos chinos ha logrado sintetizar con éxito la lonsdaleita, una forma hexagonal de diamante que es hasta un 40 % más dura que el diamante convencional. Este avance histórico, liderado por el Dr. Mingguang Yao en la Universidad de Jilin, representa el resultado de 50 años de intentos por replicar en laboratorio una estructura natural hallada originalmente en meteoritos.
Para conseguirlo, los investigadores sometieron grafito a presiones extremas de hasta 30 gigapascales —equivalente a más de 300,000 atmósferas— y temperaturas de 1,100 °C, logrando formar cristales de lonsdaleita de hasta 1.2 milímetros de diámetro. Este tamaño marca un récord para esta sustancia, permitiendo por primera vez evaluaciones fuera del microscopio.
La lonsdaleita, nombrada en honor a la cristalógrafa Kathleen Lonsdale, destaca no solo por su dureza superior, sino por su estabilidad térmica a altas temperaturas. Estas propiedades la convierten en candidata ideal para herramientas de corte, componentes electrónicos de alto rendimiento y recubrimientos industriales resistentes al desgaste.
Aunque su producción a escala aún no es viable por los elevados costos energéticos, los científicos trabajan en catalizadores que permitan bajar las exigencias del proceso. En el futuro, esta tecnología podría contribuir a reducir el uso de materiales tóxicos como el amianto y mejorar la eficiencia de industrias que requieren materiales ultrarresistentes.