El gobierno chino negó este lunes que la pandemia de COVID-19 se haya originado por una fuga de laboratorio, luego de que la CIA señalara que esta hipótesis es “más probable” que una transmisión natural. Mao Ning, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, recordó que expertos de la OMS y del país concluyeron que una fuga de laboratorio es “extremadamente improbable” tras investigaciones en Wuhan.
La CIA, por su parte, declaró el sábado que, con un “bajo grado de confianza”, considera que el virus tiene un origen vinculado a investigaciones de laboratorio, descartando en mayor medida la transmisión zoonótica. Ante esto, Mao Ning acusó a Estados Unidos de politizar el tema y lo instó a compartir información sobre sus primeros casos sospechosos con la OMS.
La polémica revive tensiones internacionales sobre los orígenes del virus que ha causado millones de muertes y alterado el panorama mundial desde 2020.