En la temporada de calor, los seguros médicos suelen registrar un incremento en la atención de padecimientos vinculados con el clima y los hábitos alimenticios. Entre los más comunes destacan:
- Salmonelosis – Provocada por bacterias presentes en alimentos o agua contaminada, genera fiebre, dolor abdominal y diarrea.
- Gastroenteritis y diarrea bacteriana – Asociadas al consumo de comida en mal estado o falta de higiene; pueden llevar a deshidratación grave, sobre todo en niños y adultos mayores.
- Deshidratación – Consecuencia de la pérdida excesiva de líquidos por el calor y sudoración, especialmente en actividades al aire libre.
- Infecciones respiratorias agudas – Ocurren por cambios bruscos de temperatura entre ambientes con aire acondicionado y el exterior.
- Afecciones de la piel – Incluyen quemaduras solares, dermatitis, acné y micosis (hongos), favorecidas por la humedad y sudoración.
Estos padecimientos, aunque prevenibles, representan una carga importante para los sistemas de salud y para las aseguradoras, que recomiendan extremar precauciones durante la temporada.
Foto de ZN con IA