Vivir en la ciudad será cada vez más caluroso, incluso más allá del calentamiento global. Un estudio publicado en Communications Earth & Environment advierte que la propia urbanización aumentará la temperatura en zonas urbanas durante este siglo. El fenómeno de la isla de calor urbana, causado por asfalto, concreto, edificios densos y consumo energético, intensifica el calor y reduce el enfriamiento nocturno.
La investigación señala que hacia finales de siglo la urbanización añadirá en promedio 0.1 °C de calentamiento local, pero entre el 10 % y 16 % de las ciudades podrían superar incrementos de 1 °C solo por expansión urbana. Aunque parezcan cifras menores, durante olas de calor elevan riesgos para la salud, aumentan la mortalidad y disparan el uso de aire acondicionado, presionando la red eléctrica.
Los expertos recomiendan más áreas verdes, árboles, materiales reflectantes y diseño urbano inteligente para reducir el impacto del calor urbano y mejorar la calidad de vida.
Foto: Playa de Acapulco en verano.