Cada 15 de febrero, justo después del Día de los Enamorados, el mundo occidental ha comenzado a adoptar una fecha especial para quienes disfrutan de su independencia: el Día del Soltero.
Aunque esta celebración tiene sus raíces en China, donde originalmente se fijó el 11 de noviembre (11/11) como una representación visual de la soltería, su influencia ha trascendido fronteras. En Asia, la fecha adquirió relevancia a partir de 2009 cuando la empresa Alibaba la convirtió en un evento comercial con ofertas y promociones, similar al Black Friday.
En Occidente, el Día del Soltero ha cobrado fuerza el 15 de febrero como una especie de “resaca” de San Valentín, ofreciendo un enfoque distinto a la idea tradicional del romance. Más que una protesta contra el amor, esta celebración busca reconocer y disfrutar la soltería sin presiones sociales. Eventos, fiestas y descuentos en tiendas forman parte de una tendencia creciente que ha convertido este día en un fenómeno cultural y comercial.
Ya sea por convicción o por circunstancias, el Día del Soltero se posiciona como una oportunidad para valorar la independencia, el amor propio y las múltiples formas de felicidad fuera de una relación.