El gobierno de Estados Unidos oficializó este miércoles la designación de seis cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras, una medida que endurece la lucha contra el crimen organizado y podría tener repercusiones en la política migratoria.
De acuerdo con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, la lista incluye al Cártel de Sinaloa, Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel del Noreste, Cártel del Golfo, Nueva Familia Michoacana y Cárteles Unidos. Además, fueron catalogadas como terroristas la banda venezolana Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha (MS-13), originaria de El Salvador.
Impacto en migrantes y seguridad nacional
La designación permite a las autoridades de EE. UU. imponer sanciones económicas, bloquear activos y enjuiciar a cualquier persona que colabore con estos grupos. Además, podría afectar a los migrantes que paguen a los cárteles para cruzar la frontera, pues podrían ser procesados o expulsados bajo la ley antiterrorista.
Mientras algunos analistas consideran que esta medida podría facilitar asilo a migrantes que argumenten que huyen del terrorismo, otros advierten que podría criminalizar a quienes fueron obligados a colaborar con estas organizaciones.
Reacciones y tensiones con México
La decisión de Rubio da cumplimiento a una orden ejecutiva de Donald Trump, quien en diciembre ya había adelantado su intención de declarar terroristas a los cárteles. Sin embargo, México ha rechazado esta postura en repetidas ocasiones, argumentando que podría abrir la puerta a una intervención militar estadounidense en su territorio.