El gobierno de Estados Unidos anunció que, a partir de un programa piloto de 12 meses, solicitará a ciertos solicitantes de visas B‑1/B‑2 (negocios y turismo) el pago de una fianza de hasta 15,000 dólares, con el fin de reducir el número de personas que exceden su estadía autorizada.
La medida, impulsada por la administración de Donald Trump, aplicará a países con altos índices de permanencia irregular, aunque el Departamento de Estado dará a conocer más adelante la lista exacta. Se estima que cerca de 2,000 personas pagarán un depósito promedio de 10,000 dólares, reembolsable si cumplen con las fechas de salida.
Según datos oficiales, en el año fiscal 2023 más de 500,000 personas se quedaron en EE. UU. más allá del tiempo permitido. La iniciativa se suma a otros incrementos aprobados recientemente, como la “tarifa de integridad de visa” de 250 dólares y nuevos cobros para solicitantes de asilo.
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