El Hijo del Santo, una de las máximas figuras de la lucha libre mexicana, confirmó su retiro definitivo del ring con una función especial en el Palacio de los Deportes, programada para el sábado 13 de diciembre. En su última batalla compartirá esquina con Alberto el Patrón, L.A. Park y Santo Jr., para enfrentar a Dr. Wagner Jr., Texano Jr., Ángel Blanco Jr. y El Hijo de Fishman, en una función que promete convertirse en un evento histórico para los aficionados.
Durante los últimos meses, el “Enmascarado de Plata” ha realizado una gira de despedida por todo el país, donde miles de seguidores le demostraron cariño y admiración por más de cuatro décadas de trayectoria. Sin embargo, uno de los momentos más llamativos ocurrió en un evento privado, cuando el luchador decidió retirarse la máscara frente a un pequeño círculo de confianza. Tras un instante sin tapa, rápidamente se colocó otra que llevaba en las manos y regaló la primera a Joaquín López-Dóriga, en un gesto que sorprendió a los presentes.
Herederero directo del legado de El Santo, El Hijo del Santo consolidó su figura como uno de los grandes íconos culturales de México. Desde los años 80 ha construido una carrera marcada por elegancia, técnica y valentía, compitiendo no solo en arenas del país, sino también en Estados Unidos, Europa, Sudamérica y Japón. Su anuncio de retiro marca el cierre de una era para la lucha libre mexicana y el inicio del camino para Santo Jr., quien recibirá oficialmente la batuta de una dinastía legendaria.
Foto: Gage Skidmore
