Los mexicanos pagan un promedio de 32.35 dólares mensuales (654 pesos) por el servicio de internet fijo, una cifra significativamente más alta que en países como Perú (24.86 dólares), Colombia (20.47 dólares), y Brasil (21.18 dólares). Esto coloca a México entre las naciones con las tarifas más elevadas en la región, a pesar de que el costo promedio ha disminuido un 52.9% en la última década.
Factores que encarecen el internet en México
1. Falta de competencia
En muchas regiones del país, el mercado de internet fijo es dominado por pocos proveedores, como Megacable e Izzi, lo que les permite fijar precios altos sin una competencia real. Algunas localidades tienen un solo operador disponible, lo que limita las opciones para los usuarios.
2. Regulación y burocracia
La instalación de infraestructura, como fibra óptica, enfrenta barreras regulatorias debido a que las reglas varían según el municipio. Esto aumenta los costos de operación para las empresas, que terminan trasladando estos gastos a los consumidores.
3. Orografía y dispersión geográfica
El terreno montañoso y las zonas remotas de México complican el despliegue de redes de conectividad, incrementando los costos de inversión y mantenimiento.
Un ejemplo regional: Chile
Chile ha logrado tarifas más accesibles gracias a una ley de infraestructura que estandarizó los procesos para el despliegue de redes. Esto ha reducido costos tanto para empresas como para usuarios, convirtiéndose en un modelo que México podría seguir para fomentar la competencia y disminuir los precios.
Hacia una solución
Para lograr una disminución en las tarifas, es necesario:
• Mejorar la regulación para atraer nuevos competidores.
• Facilitar los procesos para la instalación de infraestructura.
• Incentivar la inversión en tecnología en regiones con menor conectividad.