El expresidente Donald Trump ha modificado su enfoque sobre la guerra en Ucrania, respaldando ahora el envío de armas estadounidenses para reforzar la defensa de Kiev. Según funcionarios europeos, este giro busca elevar el costo de la invasión rusa para obligar a Moscú a frenar su ofensiva. La decisión coincide con un mayor compromiso de la OTAN y de Europa para fortalecer su seguridad tras años de depender de EE.UU.
Aunque Trump ha amenazado con sanciones económicas contra Rusia, expertos consideran que sus advertencias son débiles y con plazos poco realistas. Aun así, líderes europeos, como Macron y Starmer, refuerzan su apoyo a Ucrania con inversiones militares, conscientes de que no pueden confiar plenamente en Washington.
Este cambio influye en la economía global, la relación transatlántica y el futuro del conflicto en Europa del Este.
Foto de archivo: Trump y Zelensky en reunión en el Vaticano durante el funeral del Papa Francisco.