La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, comenzó su agenda semanal en la Ciudad de México con una reunión clave con el Senador Omar García Harfuch, quien está próximo a asumir la titularidad de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana en el gobierno de la Dra. Claudia Sheinbaum. Durante este encuentro, se abordaron los lineamientos de una estrategia integral y frontal de seguridad para pacificar el estado de Guerrero.
En la reunión, Salgado Pineda reafirmó su compromiso y coordinación con el Gobierno Federal para garantizar que todas las familias de Guerrero puedan vivir en un ambiente de bienestar y paz. Este compromiso es especialmente relevante en el contexto de la reciente implementación del Mando Especial de la Guardia Nacional en Acapulco.
El Mando Especial de la Guardia Nacional Acapulco, que entró en funciones el 1 de enero de 2024, está compuesto por 4,400 elementos de la Guardia Nacional. Esta unidad fue creada con el objetivo de restablecer y mantener el orden y la paz social, así como prevenir la incidencia de delitos en el puerto de Acapulco, uno de los municipios más conflictivos del estado.
La gobernadora destacó la importancia de este esfuerzo conjunto con las autoridades federales, subrayando que la presencia de la Guardia Nacional en Acapulco es solo una parte de una estrategia más amplia que busca abordar las causas profundas de la violencia en la región. La coordinación entre el gobierno estatal y federal será crucial para la implementación efectiva de esta estrategia y para asegurar resultados tangibles en la reducción de la criminalidad en Guerrero.
Con la llegada de Omar García Harfuch a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, se espera que se refuercen los esfuerzos en materia de seguridad, no solo en Guerrero, sino en todo el país. García Harfuch, conocido por su experiencia y firmeza en el combate al crimen organizado, será un aliado clave para la gobernadora Salgado en su misión de pacificar Guerrero y garantizar la seguridad de sus habitantes.
La implementación de estas medidas y la colaboración estrecha con las autoridades federales representan un paso importante hacia la pacificación de Guerrero, una tarea que la gobernadora ha colocado como prioridad en su administración.