Dos presuntos involucrados en el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, fueron encontrados sin vida en la carretera Uruapan–Paracho, en Capácuaro. De acuerdo con la Fiscalía de Michoacán y el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, uno de ellos tenía solo 16 años, lo que vuelve a evidenciar el creciente reclutamiento de menores por parte del crimen organizado.
El hallazgo ocurrió nueve días después de que el primer agresor, de 17 años, fuera abatido la noche del ataque durante las celebraciones de Día de Muertos. Las autoridades confirmaron que los dos jóvenes acompañaban al autor material cuando disparó contra el alcalde. El caso sigue abierto, pues también se investiga el uso de fuerza por parte de los escoltas municipales.
Ante la violencia en la región, el Gobierno federal acordó reforzar la seguridad en Uruapan y atender denuncias de extorsión y violencia criminal, problemas que siguen afectando a la población.