El contrabando de combustibles, conocido como huachicol fiscal, ha generado un daño al erario estimado en 600 mil millones de pesos, de acuerdo con investigaciones en curso, informó la procuradora Fiscal de la Federación, Grisel Galeano García.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, la funcionaria explicó que, de ese monto, alrededor de 16 mil millones de pesos ya forman parte de denuncias presentadas ante la Fiscalía General de la República (FGR). Precisó que las investigaciones continúan y que la integración de las carpetas podría derivar en procesos de recuperación de recursos.
El esquema, señaló, involucra a la delincuencia organizada, pues el ingreso de gasolinas disfrazadas de otros productos para evadir impuestos requiere de estructuras complejas. Aunque no confirmó si en las querellas se incluyen los casos recientes de corrupción en la Secretaría de Marina, sí reconoció la participación de funcionarios y exfuncionarios en los procesos judiciales.
Por su parte, Carlos Lerma Cotera, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, advirtió que los agentes aduanales también pueden jugar un papel clave en el paso de mercancía ilícita, aunque hasta ahora no enfrentan procesos judiciales. Añadió que parte del incremento anual de más de 200 mil millones de pesos en recaudación aduanera se debe al combate al contrabando.