Con la participación de dirigentes de más de 100 países y figuras clave del mundo tecnológico, como Sam Altman (OpenAI) y Sundar Pichai (Google), la cumbre en París busca establecer principios para una IA ética, accesible y sostenible.
El evento, copatrocinado por Francia e India, enfrenta el reto de conciliar intereses de potencias como Estados Unidos, China y la Unión Europea, con visiones distintas sobre la regulación tecnológica.