Las protestas contra las políticas migratorias del presidente Donald Trump y las redadas de ICE se han intensificado en Estados Unidos, especialmente en Los Ángeles, epicentro de las manifestaciones. Las movilizaciones han generado reacciones en otras ciudades del país, como San Antonio y zonas de Texas, donde también se esperan eventos de protesta este fin de semana.
El pasado domingo, Trump firmó un memorando para desplegar a la Guardia Nacional en California, lo que provocó fricciones con el gobernador Gavin Newsom, quien se opuso a la decisión. Pese a ello, al menos 700 infantes de Marina fueron enviados al área de Los Ángeles y permanecen en entrenamiento, sin una fecha clara para su posible despliegue en las calles.
En Texas, el gobernador Greg Abbott anunció el envío de tropas de la Guardia Nacional estatal en previsión de más protestas. Mencionó como motivo las marchas “No Kings”, organizadas en rechazo a lo que los manifestantes consideran un autoritarismo creciente por parte del gobierno federal.
Mientras tanto, en Los Ángeles, las autoridades locales impusieron un toque de queda nocturno en una zona restringida del centro de la ciudad, afectando a menos de 100 mil personas. La policía informó que ya ha comenzado a realizar detenciones masivas en el marco de las protestas.
Aunque no se prevén manifestaciones en Washington D.C. por parte del movimiento “No Kings”, su mensaje apunta a que el poder ciudadano debe manifestarse desde las bases, no desde la capital, justo en el contexto del desfile militar por el 250º aniversario del Ejército estadounidense.