La Generación Z en México, que representa cerca del 20% de la población, enfrenta un panorama complejo en términos de salud mental. Según la Encuesta Global Generación Z 2022 del McKinsey Health Institute, esta generación es más propensa a sufrir ansiedad y depresión. Sin embargo, los centennials están adoptando un enfoque más holístico hacia su bienestar, integrando tanto prácticas convencionales como alternativas, como la meditación, el ejercicio y el uso de herramientas digitales para monitorear su salud.
Un estudio realizado por el Tecnológico de Monterrey reveló que los jóvenes centennials en México están interesados en su bienestar físico y mental. Cerca del 46% de ellos sigue una dieta equilibrada, el 70% opta por caminar como actividad física y el 77% experimenta frecuentemente emociones positivas. Sin embargo, persisten conductas de riesgo, como el consumo de comida chatarra y bebidas con cafeína.
A nivel emocional, muchos centennials han normalizado la conversación sobre la salud mental, rompiendo tabúes que antes existían. Aunque la mayoría se siente satisfecha con su vida y sus relaciones, un porcentaje significativo todavía experimenta soledad y falta de relaciones cercanas.