La arquitectura mexicana está brillando en la Bienal de Venecia 2025 con el pabellón “Acapulco: Memorias Selectivas”, una propuesta liderada por el arquitecto José Castillo que convierte al concreto en símbolo de resistencia frente a los desastres naturales.
Desde el pasado 10 de mayo y hasta el 25 de noviembre, esta muestra se exhibe en uno de los eventos más prestigiosos del mundo bajo el tema “Intelligens. Natural. Artificial. Collective.”, propuesto por Carlo Ratti, director del Senseable City Lab del MIT.
La instalación, desarrollada por el estudio a|911 y Cadena Concepts, funciona como celosía y archivo, donde se entrelazan historias locales con arquitectura sustentable. Su objetivo es claro: rescatar la memoria de Acapulco tras fenómenos como el huracán Otis y destacar el potencial del concreto como herramienta de reconstrucción.
El pabellón detalló la revista Proceso, incluye una exhibición de Cemex con elementos interactivos, materiales reales, y piezas en concreto con grabados de flora local. La sección “Apoyo OTIS Acapulco” destaca edificios que resistieron la fuerza del huracán, mostrando el poder de este material cuando es bien utilizado.
Con más de 285 mil visitantes esperados, la propuesta mexicana participa junto a otros 62 pabellones nacionales y 89 participantes internacionales. El mensaje es claro: el concreto no solo construye estructuras, también edifica memoria, refugio y esperanza para un futuro sostenible.