En Indiana, Estados Unidos, Jennifer Lee Wilson, de 48 años y con un peso de 154 kilos, ha sido detenida bajo cargos de homicidio imprudencial tras la muerte de su hijo adoptivo.
El trágico incidente ocurrió cuando Wilson, en un intento de disciplinar al niño, se sentó sobre él durante cinco minutos, provocando su muerte por asfixia. Según su testimonio, el menor había intentado salir de la casa para jugar con un vecino, lo que enfureció a Wilson y la llevó a tomar esta drástica y fatal medida.
Al percatarse de que el niño no se movía y había dejado de respirar, Wilson llamó de inmediato a los servicios de emergencia. La mujer ahora enfrenta una sentencia de seis años de prisión por homicidio imprudencial.