En el certamen Miss Universo 2025, surgió una sorpresa que rápidamente llamó la atención del público latinoamericano: además de Fátima Bosch, México tiene una segunda presencia, aunque no oficialmente. Se trata de Naima Acosta, candidata de Suiza, quien ha generado gran simpatía debido a su historia familiar ligada a México y a su dominio del español.
La modelo de 20 años nació en Giubiasco, Suiza, pero parte de su identidad se forjó en territorio mexicano. Durante cinco años, entre la infancia y la adolescencia, vivió en Puerto Aventuras, Quintana Roo, etapa en la que conoció de cerca la cultura, el carácter cálido de la gente y el idioma que hoy habla con total naturalidad. Ese vínculo, según ha compartido, marcó profundamente su vida.
A lo largo de su participación en Tailandia, Acosta ha ofrecido entrevistas en español de manera constante, lo que de inmediato despertó curiosidad entre la audiencia. La explicación llegó de ella misma: su padre es mexicano y su estancia en el país la llevó a considerar a México como una parte esencial de su identidad.
Tras la separación de sus padres, Naima regresó a Suiza, país donde continuó su formación y se abrió paso en el modelaje profesional. Sin embargo, el apoyo que ha recibido ahora desde México y desde la comunidad latina la ha llevado a expresar públicamente su agradecimiento, asegurando que lleva a ambos países en el corazón, aunque hoy represente la bandera helvética en el concurso.
Ese reconocimiento no ha tardado en volverse recíproco. Miles de mensajes de mexicanos y latinos se han multiplicado en sus redes, celebrando su carisma, su espontaneidad y su cercanía cultural. Muchos incluso la consideran una representante simbólica de México dentro del certamen.
La participación de Acosta también refleja el contexto actual de Miss Universo, cada vez más global y diverso, donde las candidatas suelen tener raíces y experiencias que trascienden fronteras. Su caso no solo confirma esta tendencia, sino que agrega una dimensión emocional para la audiencia mexicana, que este año sigue con entusiasmo a dos mujeres vinculadas al país.