Una corte de apelaciones en Atlanta, Georgia, desestimó este martes el caso contra Donald Trump por el manejo indebido de documentos clasificados en su residencia de Mar-a-Lago, Florida. La solicitud fue presentada por el fiscal especial Jack Smith, quien argumentó que, tras la victoria de Trump en las elecciones del 5 de noviembre, el Departamento de Justicia no puede procesar a un presidente electo.
El fallo del Tribunal de Apelaciones del Undécimo Circuito se suma a la decisión de la jueza Tanya Chutkan, quien el lunes cerró otro caso contra Trump relacionado con la injerencia en las elecciones de 2020 y el asalto al Capitolio. Sin embargo, la desestimación no incluye a Waltine Nauta y Carlos de Oliveira, acusados en la misma causa por retención de documentos clasificados.
Nueva victoria judicial para Trump
El fallo es una victoria clave para Trump, quien enfrentaba cuatro imputaciones penales. El expresidente calificó los casos como “persecución política” y celebró el fallo afirmando que “perseveró y ganó”. Trump ya había anunciado que, de ser electo, despediría a Smith y cerraría los casos en su contra.
La decisión subraya la dificultad de procesar a expresidentes en Estados Unidos, especialmente tras el fallo del Tribunal Supremo en julio, que reafirmó la amplia inmunidad judicial de los exmandatarios.