La secretaria de la Función Pública, Raquel Buenrostro, anunció el nuevo enfoque de su dependencia, que ahora será conocida como la “Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno”. El cambio tiene como objetivo fortalecer la lucha contra la corrupción en México, con un modelo basado en 10 pilares clave que buscan prevenir, dignificar y regular de manera eficiente el uso de los recursos públicos.
Entre los principales puntos del nuevo modelo está la digitalización de los procesos para evitar la corrupción en las contrataciones públicas y la implementación de subastas electrónicas que han demostrado ahorros de hasta el 70%. Además, se trabajará en la creación de una cultura de denuncia, tanto en el sector público como privado, y se fortalecerán las investigaciones proactivas sobre el uso del gasto público.
Buenrostro también subrayó la importancia de separar el poder político del poder económico para garantizar que el gobierno trabaje en beneficio del pueblo y no de los grupos más poderosos. Además, adelantó la colaboración con la Secretaría de Hacienda y otros actores clave para reestructurar la administración pública, mejorar la eficiencia y asegurar que violar la ley sea más costoso que cumplirla.
Sobre la posible desaparición del Inai, Buenrostro garantizó que, de aprobarse la reforma que busca eliminar organismos autónomos, la transparencia y la protección de datos estarán aseguradas a través de una nueva Ley General de Transparencia.