En México, sólo el 59.4 % de las familias vive en una vivienda de su propiedad, reveló la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares (ENIGH) 2024 del Inegi. El resto paga hipoteca, renta o habita espacios prestados, lo que afecta su estabilidad financiera.
El estudio indica que 6.3 millones de hogares destinan parte de sus ingresos al pago de renta, gasto que en los sectores más pobres puede consumir hasta el 32.6 % de sus ingresos, lo que limita recursos para salud, educación y alimentación. Comprar una vivienda resulta inalcanzable para el 80 % de los hogares con menores ingresos, mientras que solo el decil más rico gasta más en hipoteca que en alquiler.
Expertos advierten que el acceso a una vivienda digna sigue siendo uno de los grandes retos para la economía México, pues el precio vivienda crece cada año más rápido que los salarios.