Rodrigo Pacheco Méndez firmó una de las mejores actuaciones de un tenista mexicano en el Abierto Mexicano de Tenis en décadas, alcanzando los cuartos de final del torneo y rompiendo una sequía de 13 años sin victorias de jugadores nacionales en el cuadro principal. Con este resultado, el joven de 19 años no solo se ganó el reconocimiento del público mexicano, sino que también dio un salto de más de 100 posiciones en el ranking ATP, posicionándose en el puesto 232.
Pacheco debutó con un triunfo sobre el australiano Aleksandar Vukic en un emocionante duelo de más de tres horas, donde la afición lo apoyó fervientemente. En la segunda ronda, avanzó por walkover tras la baja del noruego Casper Ruud, número 5 del mundo, quien sufrió una enfermedad estomacal. Sin embargo, su sueño terminó en cuartos de final al caer ante el español Alejandro Davidovich Fokina, ex finalista del Masters de Montecarlo.
A pesar de la eliminación, el yucateco se mostró optimista y motivado por la experiencia adquirida. “Ha sido la mejor semana de mi vida. Fueron muchas emociones en poco tiempo, pero esto me ayuda a crecer y a prepararme mejor para lo que viene”, declaró. Con su actuación en Acapulco, Pacheco se convierte en una de las grandes promesas del tenis mexicano. Su siguiente objetivo es la gira de torneos Challenger en México, donde buscará sumar más puntos para acercarse a la clasificación de Roland Garros y seguir escribiendo su historia en el tenis mundial.
Además de su impacto en el circuito profesional, la hazaña de Pacheco ha servido de fuente de inspiración para muchos niños y jóvenes presentes en el torneo. Su histórica victoria, siendo el primer mexicano en ganar un partido en el cuadro principal del Abierto Mexicano de Tenis, emocionó a miles de acapulqueños y turistas, renovando en ellos un profundo sentido de orgullo nacional y pasión por el deporte. La energía y esperanza que transmitió se palpó en cada rincón de la Arena GNP Seguros, marcando un antes y un después para el futuro del tenis en México.
