El Kremlin alertó sobre un intento de organizar una revolución popular en Georgia, similar a las ocurridas en Ucrania en 2004 y 2014, conocidas como Revoluciones Naranjas. Dmitri Peskov, portavoz presidencial ruso, señaló que las recientes protestas en el país caucásico buscan desestabilizar la situación interna tras la suspensión de las negociaciones de ingreso a la Unión Europea (UE).
Las manifestaciones han derivado en violentos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas antidisturbios. La oposición exige nuevas elecciones parlamentarias, mientras el primer ministro georgiano, Irakli Kobajidze, ha amenazado con ilegalizar a los partidos opositores, acusándolos de actuar contra el orden constitucional.
Desde el inicio de las protestas, más de 220 personas han sido detenidas y más de 100 policías han resultado heridos.
Foto: EFE