La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con la decisión del Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) de revocar 13 rutas aéreas a aerolíneas mexicanas y de cancelar vuelos de pasajeros y carga desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), construido durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum afirmó que la medida podría tener un trasfondo político o empresarial, y sostuvo que el AIFA “funciona correctamente y no hay razón para limitar los vuelos a Estados Unidos”. La mandataria informó que solicitó al canciller establecer comunicación con el secretario de Estado, Marco Rubio, y con el titular del DOT, Sean Duffy, para revisar las razones detrás de la decisión.
“Queremos asegurarnos de que esta medida no responda a intereses políticos. El gobierno mexicano defenderá sus derechos conforme a los acuerdos bilaterales firmados”, declaró.
El conflicto entre ambos gobiernos tiene antecedentes desde febrero de 2023, cuando México prohibió las operaciones de carga en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez, lo que obligó a varias aerolíneas a trasladarse al AIFA. Según Duffy, esta medida contradice los compromisos asumidos por México en los acuerdos aéreos de 2015 y afecta a las aerolíneas estadounidenses.
La decisión del Departamento estadounidense suspende los planes actuales y futuros de Aeroméxico, Volaris y Viva Aerobús, además de frenar el crecimiento de los servicios combinados de pasajeros y carga entre ambos países. No obstante, el DOT aseguró que está dispuesto a reconsiderar la medida si el Gobierno de México cumple con los acuerdos bilaterales y restablece condiciones equitativas para las aerolíneas de ambas naciones.