El oriente de Cuba vivió momentos de angustia el domingo por la mañana cuando un sismo de magnitud 6, seguido de una réplica de 6.7, remeció la región, según informó el Servicio Sismológico Nacional. Los temblores causaron daños materiales, especialmente en la provincia de Granma, donde el municipio de Pilón fue el más afectado. Las autoridades y usuarios en redes sociales reportaron daños en viviendas y locales estatales, aunque no se ha informado de víctimas.
Relatos de los residentes y respuesta de las autoridades
Maydenis Solano, residente de Bayamo, compartió cómo el sismo la sorprendió mientras estaba en casa: “Sentí cómo temblaba el asiento, después el televisor y los vasos. Saqué a los niños de la casa y luego, una hora después, volvió a temblar aún más fuerte”. Mientras tanto, Enrique Diego Arango Arias, jefe del Servicio Sismológico Nacional, aseguró que no se esperan tsunamis en la región, pese a la preocupación generalizada.
Antecedentes y otros desastres recientes
Estos sismos se suman a un año de intensa actividad sísmica en la isla, que ha registrado 14 eventos en 2024. El oriente de Cuba ya había sido golpeado por un temblor de 5.1 en octubre. Además, la población todavía enfrenta las secuelas del huracán Oscar, que dejó decenas de desaparecidos y ocho víctimas confirmadas, y del huracán Rafael, que devastó la zona occidental, causando derrumbes y un colapso en el sistema eléctrico que ha dejado a gran parte de la población sin luz por casi cuatro días.