Del 6 al 20 de julio, el Papa León XIV se traslada a Castel Gandolfo para un período de descanso, siguiendo la tradición de sus antecesores. Las vacaciones, según los Pontífices, no son sólo una pausa del trabajo, sino una oportunidad para redescubrir la belleza de la naturaleza, profundizar la fe y cultivar el silencio interior.
El Papa Francisco ha destacado que este tiempo es ideal para revitalizar cuerpo y espíritu, acercarse a la Palabra de Dios y reflexionar sobre el sentido de la vida. Juan Pablo II, amante de las montañas, subrayó que las vacaciones son también un espacio para compartir, reconectar con los demás y evitar excesos. Benedicto XVI, por su parte, señaló que frente a la naturaleza el ser humano se redescubre como criatura abierta al infinito.
Los Papas recuerdan que el descanso también debe incluir a quienes no pueden salir por salud o economía, e invitan a vivirlo con gratitud y esperanza.
Foto: El Papa León XIV en el Jardín de la Virgen María de Castel Gandolfo (29 de mayo de 2025)