La Casa Blanca ha intensificado su presión sobre Nicolás Maduro, demandando que se publiquen los resultados de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 28 de julio en Venezuela. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU., John Kirby, advirtió que Maduro debe revelar todos los datos electorales y sugirió que Washington no descarta imponer más sanciones en el futuro.
Hasta la fecha, EE.UU. ha sancionado a 16 funcionarios vinculados con las elecciones, las Fuerzas Armadas y el Tribunal Supremo de Venezuela, además de mantener sanciones económicas contra más de 100 venezolanos, incluyendo al propio Maduro.
El contexto electoral ha generado tensiones, con detenciones de opositores como Leocenis García y denuncias de abusos por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh), que condenó las violaciones de derechos durante las protestas sociales.