El estado de Guerrero despide a una de sus mentes más lúcidas y comprometidas con el rescate cultural de México: el maestro Víctor Hugo Jasso Ortiz, intelectual de gran prestigio dentro y fuera del país, quien deja una huella imborrable en el ámbito museográfico y en el quehacer cultural del sur del país.
Hombre culto, políglota de saberes y figura influyente del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Jasso convirtió el Fuerte de San Diego en la “catedral cultural” de Guerrero, al abrir sus puertas a las exposiciones de las mentes más brillantes del arte, la danza, el canto y la historia. Bajo su dirección, el histórico recinto se revitalizó como espacio vivo, en donde la cultura dejó de ser adorno para convertirse en alma de comunidad.
Este día, en un acto oficial celebrado en Zacatecas y en presencia del secretario técnico del INAH, el antropólogo José Luis Perea González, se formalizó el nombramiento de Víctor Hugo Jasso Ortiz como nuevo director del Museo de Guadalupe, institución emblemática del norte del país, donde se le augura una gestión igualmente fructífera y transformadora.
Con una trayectoria sobresaliente, Jasso ha dirigido el Centro Cultural Acapulco, el Museo Casa Carranza, el Museo Histórico de Acapulco en el Fuerte de San Diego y ocupó una posición clave en la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH. Su labor lo hizo acreedor al Premio INAH Miguel Covarrubias en 2004 y 2005, y ha sido pieza fundamental en la renovación de espacios de gran valor como el Museo Nacional de Antropología e Historia, el Museo Nacional de Historia (Castillo de Chapultepec), así como en la reestructuración del propio Museo de Guadalupe, al cual hoy regresa como su máximo responsable.
El equipo del museo en Zacatecas le dio la bienvenida con entusiasmo y respeto, reconociendo en él a un líder cultural que sabe conjugar la pasión por la historia con la innovación museográfica.
